Es difícil hablar de The Beginner's Guide sin spoilearlo. Podría hacer otra entrada de hablar sin decir nada, como la de Pony Island, pero ése fue mi propósito original hará precisamente un año y no me puse nunca a ello. Fui abandonando la idea, hasta que hace poco lo rejugué y me dije: "¿por qué no dar mis impresiones completas, dado que es lo que realmente quiero comunicar?", y aquí estamos. Esta entrada va a estar cargadita de spoilers, así que leedla solo tras terminar completamente el juego. Esto no es una explicación del juego, ni una interpretación real y veraz, nada así: solo mis pensamientos mientras jugaba pero de forma un poco más ordenada, aunque imposibles de entender sin haberlo terminado. Jugadlo si podéis: total, durará hora y media como máximo... Repito, spoilers más adelante. Este no es el tipo de entrada habitual que hago, pero ya vale la pena cambiar de vez en cuando.


Para algunos, The Beginner's Guide es un juego emotivo, por su historia y sobretodo por el desarrollo de Davey (mucho más que el del propio Coda). Para mí no es otro walking simulator, sino una idea profundamente experimental que, si existe en otros juegos, personalmente, no los conozco. Lo que voy a decir no es la verdad absoluta, naturalmente. Pero el referente que recordaba, una y otra vez desde el minuto uno, no era otro que la película Zelig (1983, Woody Allen), un interesantísimo falso documental. La gracia de esta película es que la vi una noche cambiando de canal sin saber ni qué estaba viendo, y me encontré con lo que parecía un documental de los años veinte. Veía en la pantalla a un señor que parecía Woody Allen pero que no podía serlo, porque eso era un documental de los años veinte y yo soy un desastre recordando caras, tenía que ser un error. Pero conforme avanzaba la cosa... no me podían engañar, todo era demasiado absurdo y surrealista, y eso era efectivamente una peli de Woody Allen. Esta extraña sensación de "¿es o no es lo que yo creo?" ha hecho que recuerde The Beginner's Guide, quizá, con más cariño del que merece.


Vivimos, desde el principio, condicionados por la narración de los hechos desde el punto de vista de Davey, una voz en la que no podemos confiar, o al menos no completamente. Davey nos cuela, una y otra vez, su propia interpretación de los juegos de Coda como si fuera la única y verdadera, como quien va a la clase de historia del arte y le cuentan el significado de la obra de turno: repetimos como un loro lo que dice el profesor, sin reflexionar por nosotros mismos. Empezamos, de hecho, aceptando la opinión de Davey como la válida y correcta: no se lanza directo a los simbolismos y profundidades, claro, sino que empieza despreciando (con muy buenas palabras) los niveles de Coda, tachándolos de genéricos o sosos, puesto que carecen de lo que él considera el suficiente nivel de introspección, pretenciosidad, o llámelo como quiera. A partir de la mitad del juego, Davey envía continuamente un claro mensaje: todos los niveles tienen un sentido, un fin, y la farola que aparece al final de todos ellos será como un nexo común para enlazar todas las obras de su autor. ¿Real, o gafapastada? Llega un punto en el que parece que se le quiera dar un sentido profundo e intelectualoide a locuras del nivel de los mapas de Hondo.


Personalmente, entendí The Beginner's Guide como un falso documental, no tanto sobre la vida u obra de Coda (personaje que naturalmente creo ficticio), sino como un retrato paródico de la crítica, y de cómo una explicación lo bastante convincente puede hacernos creer en la profundidad de una obra que por parte del autor tenía una intención bien diferente en el momento de nacer, captando el cómo puede afectar esto al creador a través de la historia que nos presentan. Como se dice al final: ¿y si Coda era un tío al que simplemente le gustaba construir cárceles? ¿Y si no era más que una afición suya, y si no era ningún reflejo del artista depresivo que parece que Davey quiere encontrar en él?


Descendiendo a un nivel más gafapástico, podríamos incluso pensar que Coda es realmente una faceta del verdadero David Wreden, viéndose a sí mismo como una persona idealista que simplemente hacía juegos porque le gustaba y que se ha visto contaminada por la influencia de Davey (el ficticio, que representaría al público), un personaje que dentro del juego busca constantemente la aprobación de los demás usando para ello la obra de Coda. Y así, la figura de Davey tendría un doble rol: por un lado, representaría al público que busca interpretaciones enrevesadas a cosas que no la necesitan, y que acaban perjudicando al autor, que deja de producir las obras por su propio interés, como cuando Coda presenta "el juego jugable". Pero por otro, representaría naturalmente al propio Davey, al verdadero David Wreden, que después del éxito de The Stanley Parable, cayó en la depresión por el exagerado éxito que alcanzó, y que se vio superado por las súplicas de atención que llegaban constantemente a su bandeja de correo, volviéndose adicto a la sensación de éxito pero perdiendo, sin embargo, la noción de qué significaba para él hacer juegos y qué le gustaba de aquello que creaba. Davey y Coda serían solo dos caras de la misma moneda, dos facetas del verdadero David Wreden que se esconde detrás de la obra.


Cuanto más nos acercamos al final más oscuros se vuelven los niveles, pasando por un juego de destruir toda la obra de Coda, o uno en el que una máquina que parece representar su creatividad se ve estropeada por culpa de las expectativas de los demás. No obstante el más interesante es el último, "La torre", en el que aparecen citas por las paredes dirigidas a Davey. Tras modificar un montón de partes del código para poder acceder al resto de nivel de una forma que no sería la que el autor querría, llegamos al final de la mano del narrador, y encontramos una clara súplica de Coda (autor) pidiendo a Davey, su público, que deje de tocar el código de sus juegos y, en otras palabras, arrebatarles la esencia y manipular la forma en la que fueron concebidos para que se parezcan a la imagen que él quiere.


En niveles anteriores también aparecen frases en las paredes, y entre ellas hay una que llama especialmente la atención: "Do you feel like a hero yet?" (¿Ya te sientes como un héroe?), que posiblemente haga referencia al puñetazo en la cara que te pega Spec Ops: The line al usar esta frase. Obviamente Spec Ops es un juego posterior al supuesto último juego de Coda, por lo que incluso en el caso de que toda la historia fuera real y literalmente tal cual nos la cuentan, se encontraría ahí una incongruencia, posiblemente como un añadido más de Davey, que querría llamar directamente la atención del jugador para cuestionar sus propias acciones, al igual que en el juego al que referencia. Como si Coda fuera el creador y Davey representara a la muchedumbre de jugadores que, encontrando su interpretación, arrebatan su significado (o mejor aún, su no-significado) a la obra original.


Quizá The Beginner's Guide es el grito de socorro de un artista incomprendido superado por su propio éxito que necesita plasmar de alguna forma lo que está sintiendo, o puede que sea solo la historia de un tío obsesionado con un amigo al que le gusta hacer juegos raros e injugables. Así somos los fans: sobreanalizamos, atosigamos a los autores con todo, necesitamos nuestras respuestas... sin pensar en la persona que hay detrás o en su intención original. The Beginner's Guide existe, precisamente, como una burla a este tipo de post inútiles que teorizan gafapásticamente sobre todas las cosas del juego y que intentan comprender incluso aquello que no ansía ser comprendido. Supongo por eso me sorprendió tan gratamente, por ser tan sincero... o, al menos, así lo quise ver yo.

16 comentarios:

  1. Este es uno de esos juegos de los que soy incapaz de hablar objetivamente, al igual que pienso que tus propias vivencias marcan demasiado el éxito del juego o no dentro de ti mismo. Tu propio contexto acaba siendo parte de la valoración -sí, esto ocurre en todos, pero en éste mucho más-. Este juego toca cosas muy dentro, e incluso cosas que no quiere que toque. Ningún juego me ha tocado en ese sitio (qué porno).

    Dicho sea de paso, también soy de la teoría de que Coda no es más que un nombre en clave para el propio Davey. Los juegos son suyos -o por lo menos las ideas- y no es más que un autodestripamiento público.

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    1. Totalmente de acuerdo. A mí personalmente no me llegó demasiado, no me siento identificada con nada, ni tengo ninguna vivencia así. Disfruté el juego (porque como bien señala Enrico Pucci más abajo, cito directamente "hay tanta pasión en la forma como trata de trasmitir su mensaje que aunque no te guste es imposible no querer ver hacia donde termina."), pero he de confesar que en algunos trozos se me hizo incluso demasiado largo, y siendo cortísimo pues... eso. No acabamos de congeniar y supongo que por eso nunca quise dedicarle un texto en su momento, pero lo recuerdo con cierto cariño y, tras rejugarlo, tenía que dejar aquí algo sobre él.

      Recuerdo leerte el año pasado, que fue uno de tus juegos favoritos, y la verdad es que no me sorprendió, tiene esa capacidad y habrá personas a las que les llega mucho.

      Un saludo NeoJin ^^

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  2. Curioso... no conozco el juego, pero muy curioso, y acertadas, creo, las reflexiones...

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    1. No recomiendo para nada leer el texto antes de jugar al juego... qué pena. A ver si te animas a probarlo, cuando lo tengas más olvidado... aunque creo que puede "contaminar" un poco lo que pienses de él mientras juegues.

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  3. Es un juego que me toco bastante hondo cuando tuve la oportunidad de jugarlo, aunque más que un juego encuentro que es una experiencia audiovisual (muy cercano al arte en mi apreciación). Como mencione en mi reseña y al ver la tuya, me queda claro que tiene múltiples interpretaciones, siendo uno de sus puntos fuertes, puesto que, no creo que deje indiferente a nadie.

    Me ha parecido muy interesante el conocer tu visión sobre el juego, encontrando que mantiene la buena apreciación que tengo de él :) .

    Saludos!

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    1. ¡Hola Zhols! Me alegro que te haya gustado. No había visto que publicases de The beginner's guide, ya veo tras leerte que, aún teniendo opiniones algo diferentes, nos quedamos los dos con lo que nos pareció la parte buena. Me alegro que lo disfrutaras tanto como NeoJin... personalmente no es mi caso, ojalá me hubiera llegado tanto.

      ¡¡Un saludo!!

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  4. El Spam del día: Están regalando en Uplay el Far Cry Blood dragon, aquella expansión ochentera del Far Cry 3 que añade muchísima diversión a un juego que ya estaba completo. Si alguno no lo jugó o jugó el 3, lo recomiendo porque: 1. Es GRATIs y 2. Esa aura y clíches de los 80 nunca aburren y lo saben.

    P.D.: Leeré esta entrada cuando "termine" el juego, aunque me sorprende que no hayas hablado de Stanley Parable.

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    1. ¡Hola Enrico! Te respondo en dos mensajes, porque son temas bastante diferentes.

      Lo primero, gracias por el aviso de Far cry!!! Ya lo había cogido. En su momento probé la demo de este y me pareció graciosa (pero el chiste dejaba de tener gracia en el momento en que el tutorial me limitaba tremendamente, al contrario que Far Cry 3, y no me la terminé). Me quitó las ganas de jugar, pero siendo gratis no podía decir que no a una segunda oportunidad, además que por más que mire el tráiler siempre me parece muy divertido XDD.

      Del Stanley, también lo he jugado. Lo jugué hace años, pero llegué a una parte que me daba un poco de mal rollo (solo lo podía jugar de noche porque mi ordenador no podía moverlo y tenía que ser cuando el otro estuviera libre), así que lo dejé. El año pasado jugué a The Beginner's Guide, y luego este me ha dado por pasarme el Stanley completo y, de paso, rejugar The beginner's. Simplemente tenía una deuda muy pendiente de hablar algo aquí sobre The Beginner's Guide y he querido comentarlo antes, pero Stanley ya llegará ^^.

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  5. Ahora, habiendome "pasado" el juego, realmente me gustó mucho. Stanley Parabole es un comentario, gracioso y pretencioso al mismo tiempo, del sentido del juego y el compromiso de las mecanicas jugables con el jugador, muy abierto y dejando mucho terreno a la interpretación hipster y pseudo-intelectual de siempre. En cambio, la crítica que este juego hace a la pretensionalidad y al tratar de definir a los autores a través de sus obras (como si todos fueramos una suerte de Freud) me tocó más. Si bien este metajuego le pasa lo mismo que al Club de la Pelea, que termina volviendose lo que supuestamente critica, hay tanta pasión en la forma como trata de trasmitir su mensaje que aunque no te guste es imposible no querer ver hacia donde termina.

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    1. Ahora, hablando ya sobre el juego. Muy de acuerdo en todo: The Beginner's se convierte, paradójicamente, justo en aquello que critica, diría que de forma inencional. Da igual como lo entiendas: si como el autodestripamiento público como dice NeoJin (haciéndonos partícipes al público de sacarle nosotros mismos el significado pretencioso que justo están criticando), de la forma literal en que Coda es un amigo, o cualquier otra que se te ocurra: The Beginner's Guide es justo lo que critica, pero se convierte en un viaje por lo pretencioso que te deja con una sensación extraña y, sin embargo, bien única, que ningún otro juego propone. O al menos, ninguno que yo conozca.

      Ya he dicho por otros comentarios que no me considero muy fan del juego, pero al igual que el caso Pony Island, hace algo tan único y especial que como mínimo merece echarle una jugada. Me alegro que te hayas animado a ello a raíz de ver aquí un texto publicado ^^.

      ¡¡Nos vemos!!

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  6. Hola.
    Francamente, cuando leí la entrada, iba a comparar este juego con el Stanley parable (no sé cómo se escribe), pero, veo que es del mismo autor. La verdad no he jugado a alguno de los dos pero, viendo la interpretación que se le da en esta entrada, me recuerda mucho al caso del creador de “Minecraft”; Minecraft se volvió tan popular, que la presión por parte de los jugadores resulto contraproducente.

    Para bien o para mal, siempre estamos tratando de darle un significado a las cosas que tal vez, pudiera no tener….llegando en algún punto a degenerar en fanatismo. Por eso es mejor hacer lo que te gusta sin necesidad de la aprobación ajena (como el tipo que creaba juegos solo por el placer de hacerlos (Angol dedico una entrada en su blog que habla de esta persona)).


    Saludos :)

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    1. ¡Hola BaroqueFan! Disculpa la tardanza en responder, he estado algo ocupada.

      Efectivamente, es del mismo autor: posterior, eso sí, como comentaba con lo de la depresión a raíz del otro juego. En mecánicas y demás, eso sí, no se parecen en nada: personalmente considero The Stanley Parable más un juego de experimentación y repetir una y otra vez, mientras que The Beginner's Guide es totalmente cerrado, no deja ningún tipo de elección, y se trata puramente de caminar mientras la voz de David Wreden nos narra toda la historia. No sabía lo de Notch que comentabas, aunque tampoco me sorprende mucho sabiendo que dejó el "liderazgo" del juego en 2011 y abandonó Mojang cuando la adquirió Microsoft. En este caso es algo más bestia, porque Minecraft es un fenómeno de masas como hacía años que no se veía... sería interesante conocer esa historia. Personalmente me gusta mucho Minecraft, pero tiene una fanbase casi tóxica.

      Supongo que te referirás a los juegos de Biggt, una entrada muy mítica. Se echan de menos más blogs como el de Angol: http://mundoangol.blogspot.com.es/2013/03/el-mundo-de-biggt.html

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    3. En serio te gusta el Minecraft, Rokuso? Vaya sorpresa.

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    4. ¡Me encanta, me fascina! Nunca había jugado hasta principios de este año, pero algún día le haré una entrada, he jugado bastante. De hecho en nuestro blog Retroscroll hemos publicado hasta un gameplay de Minecraft entre el jefazo Scroll y yo, cual niño rata de internet, enseñando nuestro pueblecito. (En catalán: http://retroscroll.cat/2016/visita-guiada-al-servidor-de-minecraft-de-retroscroll/ )

      No haría nunca una entrada en plan análisis porque no tiene sentido, sino más de por qué me gusta tanto... pero básicamente me encanta que Minecraft es lo que tú quieres que sea. A algunos les gusta jugarlo como si fuera un lego y sacar su vena arquitecta. A mí me gusta jugar como si fuera un roguelike en primera persona: voy a mazmorras con mi amigo, exploramos hasta los confines de la mazmorra, nos pasamos de avariciosos, morimos, y toma fail: adiós nivel, objetos, vete tú y encuentra la cueva en la que habíamos estado dos horas porque no sabemos ni hacia qué dirección habíamos caminado... ¡Es genial!

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    5. Lo decía en plan "WoW, una persona que menos esperas comparte algún gusto tuyo" porque el juego me encanta, aunque la nueva mecánica de combate no me termina de convencer aún disfruto hacer alguna base subterranea con rieles y pistones y meterme al infierno a conseguir recursos y saquear bases del infierno. Sino fuera porque mis amigos se aburrieron de él (ellos eran más ratas que yo en ese juego) lo estaría jugando todavía.

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